viernes, 5 de abril de 2013

Caso resuelto

Yo prometí no hablarte porque era lo que tú querías.
Prometí esquivarte porque tú ya no querías verme.
Me prometí a mí misma no escribir nada que hiciese que pensases,
cómo estaba,
qué pensaba.

Pero entonces se rompió y tu poesía atravesó las barreras
y la distancia de seguridad,
la educación y hasta los turnos de palabra.

Entonces, yo te pregunté:
¿Pero tú qué quieres?
y me dijiste que querías besarme.
Y yo, amor, que no puedo resistirme
a tu poesía y a tus palabras
a tus enfados breves y a tu boca,
yo también quiero besarte.

No hay comentarios:

Publicar un comentario